Debido a los últimos resultados conseguidos por la selección argentina de fútbol, el pésimo desempeño de sus jugadores - quienes a pesar de jugar como el culo y de ser incapaces de embocarle a un arco solo (a no ser que sea el propio diría Heinze) suben sus cotizaciones en el fútbol europeo de decenas de millones de euros a centenares de millones de euros - y al estado del campo de juego de River, que sería una de las principales causas de semejante mal desempeño, es muy probable que la Argentina quede afuera del Mundial de Sudáfrica 2010 o que, con muchísima suerte y si Venezuela no sigue ganando, tenga que jugar un repechaje con algún gran equipo como Australia o Islas Feroé. De cara al más que probable fiasco futbolístico que sufrirán los hinchas argentinos (que se verá refrendado el próximo 5 se septiembre cuando la nacional pierda y sea humillada nuevamente por el pentacampeón Brasil) Como si no lo supieras salió a la calle a consultar al hombre de la idem sobre qué hará si éste negro panorama se vuelve una realidad más oscura y idem (o como sería más correcto decir "e idem) que el panorama actual. Aquí todas las respuestas:
- "Me las corto, las frío y me las como mientras miro un partido del Nacional B"
- "Le pido a mi mujer que me las corte y las fría tipo escalope, porque yo no entiendo nada de cocina".
- "Me meto en el culo las banderas, cornetas, silbatos y el pasaje para ir a Sudáfrica que ya tengo comprados desde hace como un año"
- "Peregrino hasta la casa del Coco Basile"
- "Contrato un francotirador para que le pegue dos corchazos en la rodilla a Messi".
- "Nunca más compro el Olé".
- "Nunca más leo el Olé online".
- "Nunca leí el Olé así que me nefrega".
- "Me la corto en rebanadas".
- "Más vale que se clasifiquen, porque si no hay mundial, esos días me la voy a tener que coger a la bruja porque no voy a tener excusa para no darle ni la hora".
El hincha argentino, preocupado por su selección de fútbol, expresa su preocupación, una preocupación genuina, medida y coherente con nuestra forma de ser, con nuestro acervo nacional, y con nuestra pelotudez sin límites a la hora de hablar o de escribir notas que a nadie, ni siquiera a nosotros en la redacción de Como si no lo supieras, le interesan.
- "Me las corto, las frío y me las como mientras miro un partido del Nacional B"
- "Le pido a mi mujer que me las corte y las fría tipo escalope, porque yo no entiendo nada de cocina".
- "Me meto en el culo las banderas, cornetas, silbatos y el pasaje para ir a Sudáfrica que ya tengo comprados desde hace como un año"
- "Peregrino hasta la casa del Coco Basile"
- "Contrato un francotirador para que le pegue dos corchazos en la rodilla a Messi".
- "Nunca más compro el Olé".
- "Nunca más leo el Olé online".
- "Nunca leí el Olé así que me nefrega".
- "Me la corto en rebanadas".
- "Más vale que se clasifiquen, porque si no hay mundial, esos días me la voy a tener que coger a la bruja porque no voy a tener excusa para no darle ni la hora".
El hincha argentino, preocupado por su selección de fútbol, expresa su preocupación, una preocupación genuina, medida y coherente con nuestra forma de ser, con nuestro acervo nacional, y con nuestra pelotudez sin límites a la hora de hablar o de escribir notas que a nadie, ni siquiera a nosotros en la redacción de Como si no lo supieras, le interesan.
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