EXCLUSIVO: EL DISCURSO CON EL QUE PATRICIA BULLRICH SE OPUSO A LA REESTATIZACION DE LAS AFJP

"Bajo ningún punto de vista aprobaremos una ley que lleve bienestar, perspectivas de un futuro venturoso, y posibilidades de vivir mejor los años que les quedan de vida a esos viejos desagradecidos a los que, cuando fuimos gobiernos les dimos lo que nos parecía que les hacía falta para que tuvieran un poco de humildad y entendieran que no eran los únicos que vivían en ésta sociedad y que en el gobierno del que fui parte, nadie tenía privilegios: les mandamos una rebaja del 13% en sus sueldos miserables, pero no de mala onda ni por ser unos hijos de puta que preferíamos entregarle hasta los calzones al FMI para que nos tirara unos préstamos para pagar los préstamos que habíamos sacado para pagar los otros préstamos que les habían dado a gobiernos anteriores para repartírsela entre todos y con lo que sobraba pagar préstamos que eran préstamos para cancelar préstamos anteriores dados para comerse toda la torta y con las migajas que quedaban pagar préstamos de la época de Bernardino Rivadavia y la Casa Baring. Lo hicimos para que no se sintieran desplazados y siguieran formando parte del tejido social del que formaban parte casi todos los argentinos. Les rebajamos los haberes jubilatorios para que fueran tan miserables y muertos de hambre como casi todos los habitantes de ésta patria nuestra y digo patria y me emociono recordando aquellos días en los que el socialismo fue una realidad, porque excepto quienes gobernábamos y los empresarios de siempre, todos los demás estaban en un pie de igualdad unos con otros: estaban todos hechos mierda, al borde de la inanición, sin un centavo en los bolsillos, sumergidos en la miseria más absoluta y no íbamos a permitir, dentro del ideal de justicia social que perseguía el gobierno encabezado por el padre del novio de Shakira, que los viejitos se hicieran los vivos y lo pasaran mejor que el resto de sus connacionales. Por eso frente a éste despojo que sufren hoy a manos de éste gobierno montonero izquierdista de ultraderecha nuestro queridos y esforzados banqueros digo y grito ¡no! y grito ¡jamás! y grito ¡ojito!. Solo sobre mi cadáver. Aunque, por favor, no se tomen esto último muy literalmente que todavía tengo mucho por qué vivir, muchos jubilados a los que poner en su lugar y una jubilación privada abultadísima que me espera al final de mis días como legisladora veleta y política carente casi casi de todos principios y de moral alguna".