Dirigentes del Partido Obrero y vecinos de Vilma Ripoll negaron que “los atentados contra los trenes hayan estado perfectamente digitados, organizados y planificados con 3 semanas de antelación en la sede central que el Partido posee en Capital Federal”. Aseguraron que “la gente, cansada por viajar como ganado y harta de los malos tratos recibidos por los concesionarios de los trenes, actuó de manera espontánea una vez que nuestros afiliados hubieran prendido las primeras bengalas que, de casualidad, llevaban en unas bolsas que les dimos el día anterior a los eventos que ocurrieron en 2 estaciones diferentes y al mismo tiempo, con apenas 3 segundos de diferencia entre el comienzo de un evento y el siguiente” aclaró una alta fuente del Partido Obrero. Desde el gobierno dicen que tienen filmaciones “donde se ve la cara de los chaboncitos que, imitando a Billy Bond, movilizaron a la gente al grito de rompan todo”. “Además” agregaron las fuentes gubernamentales “es innegable que estaba todo organizado. Si tenían handys para comunicarse, bengalas para incendiar los vagones y pepas para estar del cráneo mientras destruían todo”. El Partido Obrero retrucó diciendo que “esas imágenes que el gobierno dice tener no fueron tomadas durante la quema de los trenes de ayer, sino durante la quema de vagones de la vuelta anterior, donde también prendimos fuego varios trenes y rompimos una estación”, para rectificarse inmediatamente y aclarar que “quise decir que esas imágenes son de la Creamfield del año pasado, donde todo el PO fue a hacer militancia al ritmo de Paul Oakenfold” a lo que el gobierno respondió que “no digan giladas, si todos saben que los troskos lo único que escuchan es Silvio Rodriguez y en su reputa vida habrán ido a una rave”. Como se ve los ánimos están calientes. La cosa está que arde. Hay quienes quieren echar más leña el fuego. Y todo justo ahora que el horno no está para bollos.
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